EL BAMBÚ Y LOS PROPÓSITOS DE AÑO NUEVO

Hoy clase de botánica

Lee, que al final lo verás claro

¿Conoces la historia del bambú chino?

Es fascinante y muy reveladora, sobre todo en estas fechas en las que todos empezamos a pensar en los propósitos de Año Nuevo.

Cuando plantas una semilla de bambú chino, no sucede nada durante cinco años.

Ni un brote,

ni una hoja,

nada.

Si lo plantas, puede hasta desesperarte

ver como riegas, lo cuidas a diario y NADA, hasta te dan ganas de abandonar.

LA MAYORÍA LO HACE

Pero el bambú es diferente,

se centra en lo importante

Durante ese tiempo, las raíces se van extendiendo profundamente bajo la tierra, preparándose para algo grande.

Y de repente, al quinto año, en solo unos meses,

¡el bambú crece hasta 25 metros!

La lección es clara: el éxito, la salud, los cambios importantes requieren constancia y paciencia.

El bambú no se ve, eso si, no deja de crecer donde importa: bajo tierra.

En la época actual, de la inmediatez, del querer los resultados sin esfuerzo….y para ayer….son caracteristicas que SOLO poseen los que de verdad están comprometidos con su objetivo.

Ahora comparemos esto con el eucalipto:

este crece rápido

crece super rápido

al crecer tan rápido tiene un problema

que sus raices no crecen tanto, son poco profundas y más débiles.

A la primera ráfaga de viento lo derriba porque no está preparado para sostenerse.

Es fácil entusiasmarse con un propósito al inicio del año, pero la motivación no basta.

La clave está en instalar hábitos sólidos, en echar raíces profundas que te sostengan incluso cuando los días sean difíciles.

Si estás lidiando con un problema de salud o una enfermedad, o simplemente quieres mejorar tu bienestar, este principio es más importante que nunca.

Porque la constancia y la preparación son las que te darán resultados duraderos, no solo un pico momentáneo de energía.

Y lo he visto muchas veces, quienes consiguen los resultados son los que persisten, siguen el plan.

Incluso yo mismo lo he vivido, he sido como el eucaliptus, supermotivado y luego a la primera de turno, abandono.

Ahora soy más como el bambú, y la diferencia se nota, los resultados son totalmente opuestos.

No me creas, COMPRUEBALO si tienes lo que hay que tener

Estas Navidades, mientras muchos se preparan para hacer propósitos que abandonarán en semanas, tú puedes ser diferente.

Puedes empezar a sembrar las raíces de tu propio bambú y asegurar que este nuevo año sea el comienzo de un cambio permanente, no un intento más que se lleva el viento.

¿Estás listo para empezar a cultivar esas raíces?

Si quieres ser como el bambú….

https://www.renovatiohealth.net/recuperasalud

P.D. No olvides que la diferencia entre quienes logran sus objetivos y quienes no, está en la perseverancia. ¡Hablemos de cómo puedo ayudarte a echar raíces profundas para que nunca más vuelvas a tambalearte!